Últimamente no sé que esta pasando en este país, que nos hemos empeñado todos en cambiar de deporte nacional, y en detrimento del fútbol, nos hemos decantado en favor de otro: el cubrirse de gloria/mierda.
Si obviamos las perlas de nuestras "estrellas internacionales", como
Javier Bardem, la última de muchas, la ha protagonizado el pasado fin de semana un hombre al que estamos acostumbrados a ver
tras un micrófono, día sí y día también, en las noticias del mediodía. Un paisano y vecino de
Lugo, que ejerce en la actualidad como Vicesecretario General del partido que gobierna este país, y al que tengo el honor de premiar con el galardón de "Cagada de la Semana".
El amigo
Pepiño Blanco, en una conversación de "corrillo" antes del
derby madridista que tuvo lugar entre el Real y el Atlético de la capital española, hizo el siguiente comentario: "Le tengo un asco al Madrid que no lo puedo ni ver".

Lo jorobado de estos comentarios, es que (desgraciada/afortunadamente) siempre hay alguien cerca para poder escucharlos y metértela doblada. Y por muy "distendidos" que sean, de boca de un mandatario del gobierno pues... suenan un poco "
reguleros". Máxime hablando de quién hablas, y sabiendo (o no) que detrás de una afición futbolística que se cuenta por cientos de miles, hay otros cientos de miles de posibles (y potenciales) votantes del partido que uno representa. Creo que a este tipo de comentarios, el periodismo actual los denomina como: Desafortunados. Yo sencillamente los llamo CAGADAS.

Otra buena fue el "consejo" que nos daba en su día el actual Secretario de Estado de Medio Rural y Agua (entonces Secretario General de Agricultura)
Josep Puxeu, para afrontar la crisis las pasadas
Navidades, animándonos a comer conejo en lugar de pavo, ya que,
decía él "es una carne sana, ligera, muy apetecible y barata". Así como incunable
fué también la parte de la biografía de Esperanza
Aguirre en la que nos confesaba sus extremas penurias económicas diciendo:
"No tener pagas extras me tiene mártir, las he tenido toda mi vida y las echo de menos en Navidad y en verano. No es que haga números a final de mes, es que muchas veces no llego, con la excepción de cuando fui presidenta del Senado, que entonces sí cobraba un buen sueldo. En el paso del Senado a la Comunidad casi dividí por dos los ingresos".
Supongo que es el duro precio que hay que pagar por ser
diezmileurista...

Aunque mis dos favoritas, sin ningún género de dudas son las de Pedro
Solbes y Mariano
Rajoy a partes iguales. El uno diciendo que el cambio climático era un cuento chino argumentando que
"tengo un primo que es físico y de esto sabe mucho"; y el otro haciendo el comentario, también "informal" (a juicio del ya mencionado vecino de
Lugo,
Pepiño) de que si no llegábamos a fin de mes era por las propinas que dejábamos en los cafés.
Qué gente más simpática, ¿verdad? Si es que como cachondos mentales no tienen precio. Ojalá la mitad de la gente tuviese un cuarto del sentido del humor que tienen ellos. A cada día que pasa, nos hacen a todos un poco más felices arrancándonos una sonrisa, aun en los momentos más complicados. En esos días en los que las cosas
están un poco más difíciles que el anterior, incluso en esos
días...
ahí están ellos para alegrarnos la vida y meternos esa inyección de comedia de calidad y buen rollo que siempre necesitamos. Tienen esa facultad. Muy poca gente la tiene. Deberíamos
estarles agradecidos. Si es que... ¿¿qué sería de nosotros sin su buen humor?? ...esperen, aguarden un momento... me
están pasando una
información... ¿¿Cómo??, ¿¿Qué?? ¡¡¡No son humoristas!!! ¡¡¡Son las personas que deciden el destino de este país!!!
...estamos
jodidos.